viernes, septiembre 28, 2012

HARAKIRI: XIMENA, MI AMOR


"nunca conocí la suerte no me la han presentado, 
desde que llegaste a mi vida,
 creo haberla encontrado"
-TALISMÁN, Lalo Vargas.






Los hijos definitivamente nos vienen a cambiar la vida, a veces de maneras muy raras, los cambios que se nos presentan hacen que tengamos que modificar ciertos hábitos, hábitos  muy malos, y costumbres, todo para crear un ambiente de seguridad y confort para esas personitas que ahora necesitan de nuestra atención y dedicación.

Siempre pedí a Dios una niña, soñaba con tener una niña, y se me concedió, me preguntaban que si cómo la quería, pregunta que se me hacía ociosa, yo solo quería que naciera bien no importando color de piel, ojos o tipo de cabello, y afortunadamente nació muy sana, y es mi adoración, aunque sea más traviesa de lo que fui yo de niño y que además en lugar de decirme papá últimamente insista en llamarme Lalo.

Cuando aún no sabíamos el sexo de nuestro bebé, como nos sucede en estos momentos con el segundo que ya viene en camino, se me asignó  la tarea de buscarle nombre ya que si nacía niña yo tendría que elegirlo, esa tarea se me hace complicada porque el nombre de un individuo es una parte importante de su personalidad, y no quería equivocarme, tuvimos una niña y el nombre elegido por mí fue Ximena.

Pero en ocasiones los nombres quedan de lado cuando ves a esa criaturita hermosa y le comienzas a llamar con apodos cursis y hasta algunos que para otros pueden ser ofensivos, pero como en muchas cosas que ocurrirán en la vida de mi hija, esas opiniones de la gente sobre cómo le digo a mi retoño no me importan, mi hija ha sido víctima de mis apodos, como todos lo fuimos de nuestros respectivos padres, llegándole a decir los siguientes: Polloyon, Cachetes, Gordis Lobis, Niña Mono, Monstro, Mena, Chimena, Doña Tremendina, Colitas, Conejón, Mono Cachetón, etc.

Como  mamá cuervo, en mi caso papá cuervo,  me la pasaría elogiando las virtudes de mi hija, pero si algo me ha gustado hasta ahora es que posee una terquedad que bien encaminada sé que le ayudará a conseguir las cosas que quiere en la vida, es fuerte, no es frágil, bueno solo cuando nos quiere hacer sentir mal por haberla regañado, y es muy inteligente, cuando le conviene, porque cuando se lo propone puede fingir demencia y ser hasta payasita, además no sé cómo sucedió pero me salió bailadora y le llaman mucho la atención los instrumentos musicales, que para mí es un alivio aunque aún falta la cuestión del gusto por la lectura que en un futuro podré ver si le logro inculcar lentamente.

Como todo papá tengo miedo de equivocarme, tengo miedo de que en mi afán por prepararla para la vida mi insistencia en algunas disciplinas como la música y leer se le conviertan en cosas indeseables, por eso busco irme lento, para no saturarla, confío en que la información genética heredada le despierte la curiosidad suficiente como para quedase atrapada por los encantos de la música, literatura y el baile.

Como les decía en un principio los hijos nos cambian la vida de maneras inesperadas, mi hija ha llevado a cabo un par de travesuras que se me han hecho muy simpáticas y excelentes anécdotas, como la ocasión en la que sumergió por segunda vez mi Black Berry en el WC, y la mejor y última que hizo, la cual contaré más detalladamente.

Resulta que me dispuse a leer a los clásicos de la literatura y me compre el libro El Anticristo de Friedrich Nietzsche el cual comencé a leer y con el paso de los días se me hizo repetitivo y hasta absurdo, me hartó, me estanqué tratando de leerlo, lo dejé un el baño y en mi ausencia mi hija encontró abierto el baño y tal vez intuyendo el hartazgo de su padre sobre ese libro lo tomó y sin piedad lo tiró al WC cuando este estaba sucio, lo que yo interpreté magistralmente como que Ximena había mandado a la mierda el Anticristo de Nietzsche.


Esa obsesión de Ximena de tirar las cosas al excusado se me hace hasta filosófica, lo interpreto últimamente como un “Recuerda que si hay cosas en la vida que te molestan y no te dejan ser feliz, siempre puedes mandarlas a la mierda” o al caño, llegan al mismo lugar.


Gracias a mi esposa cristina por haber regalado esta niña maravillosa que, este viernes 28 de septiembre, cumplirá 2 años de haber llegado a nuestras vidas, te amo Ximena, mi niña mono, mi amor mi Talismán.


Feliz cumpleaños mi niña.

Les dejo el link de la canción que le escribí a mi hija cuando aún estaba en gestación, interpretada por mi hermana Rosita, con música de Isra Montalvo y la letra de un servidor escuchen Talismán, dedicada mi Ximena.


Escúchala aquí: http://www.myspace.com/losyamerito/music/songs/talisman-los-ya-merito-ft-rosalinda-85859728