“Sólo cuando el último árbol esté muerto,
el último río envenenado,
y el último pez atrapado,
te darás cuenta que no puedes comer dinero.”
– Sabiduría indoamericana
FOTO: TABASCO HOY.
Como tabasqueños nos
vanagloriamos de vivir en un paraíso tropical ubicado en el sureste del país,
lo que en el pasado era una región destinada para exiliar a gente “indeseable”
originaria del norte del México en
formación, por los años de la colonia, hoy es un estado que busca salir del atolladero
para integrarse a la vida productiva del
país, queremos ser reconocidos y que las inversiones extranjeras y nacionales
nos lleven a una bonanza económica de desarrollo de proporciones industriales,
y ahí, como alguna vez lo dijo el Mimo de México Don Mario Moreno "Cantinflas" , ¡ahí está el detalle!
Esas ganas de maquillar un estado,
que nunca debió sembrar todas sus esperanzas en el petróleo, para que se vea
como un lugar próspero y productivo han llevado a los gobernantes y a los “visionarios”,
con ideas de la revolución industrial, a querer construir fábricas y
maquiladoras de todo tipo, lo bueno es que no siempre lo han logrado, pero el
fantasma del petróleo ronda la salud ambiental del estado y es el hilo del
cual pende en todo momento la economía de nuestra región.
Se ha intentado fomentar el
turismo, se ha intentado promocionar productos Tabasqueños hacia el extranjero,
hasta políticos mandamos a la capital del país con el sello de “Hecho en
Tabasco”, todo para ser tomados en cuenta por los demás estados, por la ciudad
capital, para que no nos dejen fuera con los presupuestos, para que no seamos
invisibles ante los ojos de los que más tienen y quieren seguir aumentado sus riquezas.
Han arribado al estado tiendas y concesionarias
automotrices con productos de precios exorbitantes, todo lo necesario para
reflejar un estatus que es solo de unos cuantos, porque los de a pie, ni
trabajando una vida entera lo conseguiríamos, y no estaría mal si no fuese
porque todos estos son indicadores falsos de un Tabasco que no está evolucionando
de una manera adecuada, estamos pagando un precio muy alto por todo ese
supuesto crecimiento económico del cual quieren presumir gobernadores y
empresarios, los que siempre han tenido y aún quieren más.
El precio que estamos pagando es
el ecocidio, no es un secreto que los ayuntamientos y gobiernos de la historia
moderna de Tabasco han autorizado la construcción de centros comerciales y
plazas en vasos reguladores que ayudaban mitigar un poco las inundaciones, y
qué decir de la fauna afectada en cada proyecto realizado, donde muchos veían
un terreno con potencial comercial por su ubicación, en realidad se trataba de
un área de auxilio en casos de inundaciones.
En los casos de las tierras en
Tabasco afectadas por PEMEX la situación no es diferente, la necesidad de la
gente de campo que se ha visto afectada por derrames y explosiones, aceptan sin
miramientos las supuestas reparaciones de terrenos, los cuales dejan de ser
productivos, así como indemnizaciones que son paliativos momentáneos para la desgracia de esa gente, porque a la
vuelta de unos años el dinero se gastará y las carencias serán mayores.
Un estado agrícola que con la
bonanza de la expropiación petrolera le dio la espalda al campo, al ganado, a
la pesca, al cacao, al coco, al Plan Chontalpa, a la vida sustentable que hoy
quieren recuperar, pero no porque crean en los beneficios reales, más bien lo
hacen porque ya es obligatorio, porque es una moda.
Ayer 25 de Noviembre pasé por el
Vaso Cencali ubicado a un costado del parque Tomas Garrido Canaval que se
encuentra sobre la Av. Paseo Tabasco y sobre el cual se encuentra el, hoy ya
emblemático, MUSEVI, y el panorama era desolador, el agua es de color negro despide un olor fétido y una buena cantidad de peces muertos flotan a las orillas,
cuando vi eso me pregunté, en qué jodido momento sucedió si hacía unos meses
no estaba así, y buscando en internet encontré las respuestas gracias a las
notas de los diarios el Heraldo de Tabasco: Mató burocracia al Vaso Cencali (http://www.oem.com.mx/elheraldodetabasco/notas/n2782435.htm)
y Tabasco Hoy: Mata CONAGUA a Vaso Cencali (http://www.tabascohoy.com.mx/noticia.php?id_nota=276136)
.
Las notas de ambos diarios hacen
mención de que una tubería de aguas negras, ya muy dañada, necesitaba
reparación, el presupuesto para este trabajo venía del FONDEM, pero se dice que
la licitación tardó mucho en resolverse para la contratación de la compañía que
realizaría el trabajo, además se comenta que la temporada de lluvias retrasó la
reparación al igual que la avería del cárcamo de la zona, y al final las dependencias
se limitan a decir que van a meter biólogos para ver cómo se repara el daño.
Ahora resulta que no se le puede
fincar responsabilidad a nadie, y no se trata de darse golpes de pecho, pero
carajo, la cabeza de alguien tiene que rodar, hay que enseñar a los servidores
públicos que no pueden ser indiferentes ante problemas como este, navegando por
internet me encontré con el famoso Proyecto 2010 Desarrollo Bicentenario para el Municipio
del Centro 2010-2012 (http://www.villahermosa.gob.mx/portal/images/stories/comunicacion/desarrollo_bicentenario.pdf)
en el cual se proponía la construcción del MUSEVI y el rescate ecológico del
Vaso Cencali, el MUSEVI se construyó, pero el Vaso Cencali nunca vio su
rescate.
En Tabasco debemos aprender que
el desarrollo y evolución de las ciudades más cosmopolitas del mundo están
cambiando, si no es que ya lo hicieron, la forma en que su desarrollo va de la
mano de una cultura ecológica incluyente, me refiero a que optaron por una
simbiosis entere lo vivo y lo inanimado, lo verde con el concreto, la flora, la
fauna y el agua con edificios e inmobiliaria general, ser moderno no implica
necesariamente tener que arrasar con selvas y cuerpos de agua, una modernidad
actual obliga, dadas las circunstancias ecológicas, el correcto uso y conservación
de los ecosistemas, la responsable clasificación y recolección de la basura así
como la implementación de energías renovables, si hay que modificar leyes hagámoslo
y exijámoslo, que sea un delito más grave tirar basura en la calle que pasarse
un alto, que las empresas sean realmente multadas por sus malos manejos de
residuos, especialmente la paraestatal la cual parece intocable, que los nuestros
no arrojen solo datos estadísticos, esos números necesitan convertirse en
acciones como cancelaciones de operaciones y multas multimillonarias.
A los responsables de la muerte
del Vaso Cencali, porque sí tienen nombres y apellidos, se les hace fácil decir que van ver de qué
manera reparan el daño, pero si no son enchiladas, y desafortunadamente este
tipo de cosas van a seguir sucediendo hasta que nosotros los ciudadanos presionemos
a las autoridades para que cuiden, junto con nosotros, lo poco que nos queda,
Tabasco es bello, Tabasco puede llegar a ser el mejor estado y no para ello
tiene que vender al mejor postor su frágil equilibrio ecológico, cuidemos lo
que tenemos o terminaremos siendo un tiradero de desechos petroleros e
industriales, ese es un futuro que créanme, no queremos para nuestros hijos.